jueves, octubre 14, 2004

Uñas de negro

Así como la persona que se siente un poquito fea se pinta las uñas de negro y el pelo de violeta, para ser fea por elección, así dejé de escribir yo aquí en un momento de alta publicidad de mi blog.

Porque necesito poder decir que estoy falto de público por escribir poco. Porque necesito esconder en una voluntad la tragedia de mis dotes naturales.

Pero acabo de leer un blog primitivo, y me ofreció tantas emociones que brotó en mí nuevamente esa idea de vocación de servicio. Esa idea de deberse al público. Así que una vez más tropiezo con la piedra de la promesa en lugar de la acción, y aquí recomienzo la escritura.

En honor a ellos. Al primitivo y a la de las hermosas manos, que mi espalda extraña tanto. Y a la pequeña cuya nariz nada tiene que envidiarle a la Cleopátrica. No puedo ser menos que ellos en el sentido del tesón (sí puedo en tantos otros).

Heme aquí, pues, con el quitaesmalte presto y la peluca puesta.

Veremos qué pasa.

1 comentario:

b. dijo...

Ya te lo había en persona, cuando todavía no me sentía digna de siquiera escribir un comment. Y pensar que ahora hasta me abrí solita y sin ayuda mi propio blog (que luego fue ayudado en detalles estéticos menores y no tanto, lo cual agradezco de sobremanera)
Decía, que vuelvo a ver este post y necesito dejarlo por escrito: me tiño mi mechón de pelo de violeta y porque considero que me queda lindo. Sin él también sería linda (muy, me atrevería a decirte hoy en un ataque de amor propio y alta autoestima). Pero que quede claro, NO me tiño el pelo de violeta para ser fea por elección. Creo estar bastante buena (hemos hablado de ello y has estado de acuerdo) y mi mechón violeta me da un toque diferente. Ni más feo ni más lindo. Pero seguro que no me hace más fea a mí.